Considerado el último supercoche de cambio manual, es el coche de calle más rápido de Porsche de todos los tiempos. Fue creado con el fin de homenajear a sus predecesores, el Porsche 911 GT1-98 y el Porsche LMP1-98, famosos automóviles de carreras que fueron abandonados con el cambio de reglamento de la FIA en 1998. Si hay algo que tengan en común todos aquellos que han tenido la suerte de probarlo es que es muy veloz, y es que fue nombrado coche más rápido de 2005. Su increíble fuerza provenía de una unidad V10 atmosférica, que en un principio fue desarrollado secretamente en 1992 para el equipo Foortwork de Fórmula 1 . Situado en posición central, tenía una potencia máxima de 612 CV. a 8000 rom. y producía un par máximo de 587 Nm. a 5750 rpm, y debido a que toda esta potencia iba dirigida a las ruedas traseras, Porsche equipó al Carrera GT con un avanzado sistema de control de tracción para evitar que resultara potencialmente peligroso en manos inexpertas. Sin embargo, carecía de control de estabilidad. Gracias al empleo de materiales ligeros como la fibra de carbono, y aleaciones de aluminio y magnesio, el peso se redujo a 1380 Kg, lo cual permitió una relación peso-potencia de 
443 CV por tonelada, suficiente para superar la barrera de los 330 Km/h y ejecutar el sprint de 0 a 100 en tan sólo 3'9 s. En la carrocería destacan tres tomas de aire en el frontal. Las de los laterales para refrigerar los frenos, y la central para enviar aire fresco al gigantesco radiador, 5 veces más grande que el de un 911 normal. En los laterales, unas toberas bidireccionales refrigeraban el motor y expulsaban el aire caliente del radiador y los frenos, y en la parte trasera encontramos un difusor y un alerón que se despliega automáticamente a 110 Km/h. La suspensión se tomó del abortado proyecto de coche de carreras que porsche diseñó para Le Mans, asi que su estructura principal es de dobles brazos oscilantes, y los frenos están fabricados con el compuesto Porsche Ceramic Composite Brakes, con un diámetro de 380 mm. en ambos ejes. Lleva llantas de aleación de magnesio, hechas con un proceso de forjado especial y fabricadas expresamente para él, al igual que sus neumáticos en medida 265/35 ZR19 delante y 335/30 ZR20 detrás. Sólo existen 1270 Porsche Carrera GT en el mundo, aunque este número hubiera sido mayor de no ser por la grave escasez de demanda. Su precio es, o mejor dicho, fue de 450.000€.
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443 CV por tonelada, suficiente para superar la barrera de los 330 Km/h y ejecutar el sprint de 0 a 100 en tan sólo 3'9 s. En la carrocería destacan tres tomas de aire en el frontal. Las de los laterales para refrigerar los frenos, y la central para enviar aire fresco al gigantesco radiador, 5 veces más grande que el de un 911 normal. En los laterales, unas toberas bidireccionales refrigeraban el motor y expulsaban el aire caliente del radiador y los frenos, y en la parte trasera encontramos un difusor y un alerón que se despliega automáticamente a 110 Km/h. La suspensión se tomó del abortado proyecto de coche de carreras que porsche diseñó para Le Mans, asi que su estructura principal es de dobles brazos oscilantes, y los frenos están fabricados con el compuesto Porsche Ceramic Composite Brakes, con un diámetro de 380 mm. en ambos ejes. Lleva llantas de aleación de magnesio, hechas con un proceso de forjado especial y fabricadas expresamente para él, al igual que sus neumáticos en medida 265/35 ZR19 delante y 335/30 ZR20 detrás. Sólo existen 1270 Porsche Carrera GT en el mundo, aunque este número hubiera sido mayor de no ser por la grave escasez de demanda. Su precio es, o mejor dicho, fue de 450.000€.VOLVER